Primer paso: viabilidad y normativa
Antes de empezar con la instalación, es fundamental verificar que tu garaje cumple con los requisitos necesarios y que la instalación se ajusta a la normativa vigente. Este paso previo te ahorrará tiempo, dinero y posibles problemas en el futuro.
Comprobando la compatibilidad de tu garaje
Lo primero es confirmar que tu garaje está preparado para un punto de recarga. Un técnico electricista cualificado deberá evaluar la instalación eléctrica de tu garaje, incluyendo la potencia disponible, el tipo de conexión (monofásica, que es cuando las pestañas del contador van de uno en uno o en pareja; o trifásica, que es cuando las pestañas del contador van unidas de tres en tres o más) y el estado general de la instalación.
Además, deberá verificar que la instalación se puede adaptar para la carga de un vehículo eléctrico sin afectar al suministro eléctrico de las demás plazas de garaje ni de las zonas comunes del edificio.
Este paso es crucial para evitar problemas futuros y garantizar una carga segura y eficiente. El técnico también te asesorará sobre la mejor ubicación para el punto de recarga, teniendo en cuenta la longitud del cable de tu vehículo y la accesibilidad a la toma de corriente.
Normativa y permisos a tener en cuenta para la instalación de un punto de recarga
En España, la normativa principal que regula la instalación de puntos de recarga es el Real Decreto 1053/2014, que establece los requisitos técnicos y de seguridad. Esta normativa se complementa con las regulaciones específicas de cada comunidad autónoma, por lo que es importante informarse sobre las particularidades de tu región.
En general, no suele ser necesario un proyecto eléctrico para instalaciones en garajes comunitarios de menos de cinco plazas, a menos que se den ciertas circunstancias, como una potencia muy elevada o la necesidad de modificar la instalación general del edificio.
Consulta con un técnico electricista para asegurarte de que cumples con todos los requisitos legales y para obtener los permisos necesarios antes de iniciar la instalación.
Segundo paso: acuerdos en la comunidad de vecinos
Una vez confirmada la viabilidad técnica y la normativa aplicable, es hora de hablar con tus vecinos. Una buena comunicación es clave para una convivencia sin problemas y para evitar posibles conflictos.
Informar y obtener el consentimiento de la comunidad
Aunque la Ley de Propiedad Horizontal te permite instalar un punto de recarga en tu plaza de garaje sin necesidad de la autorización de la comunidad, es fundamental informar por escrito a la comunidad sobre tu intención, adjuntando un presupuesto detallado de la instalación y las características del punto de recarga.
Una comunicación transparente y detallada evitará malentendidos y facilitará el proceso. Además, es recomendable presentar la solicitud en una junta de propietarios, aunque no sea obligatoria, para informar a todos los vecinos y resolver posibles dudas.
Opciones para la gestión del punto de recarga
Existen diferentes opciones para la gestión del punto de recarga en un garaje comunitario:
- Puedes optar por un contador individual para tu plaza, lo que te permitirá controlar tu consumo y pagar solo por la energía que utilizas. Esta opción te da mayor independencia y control sobre tu gasto.
- También puedes llegar a acuerdos con la comunidad para compartir el coste de la instalación o la gestión de la carga, lo que puede ser beneficioso para todos los vecinos. En este caso, es importante establecer un sistema de reparto de costes justo y transparente, que tenga en cuenta el consumo de cada usuario.
Tercer paso: elección del punto de recarga
Con la viabilidad confirmada, la normativa en orden y el visto bueno de la comunidad, llega el momento de elegir el punto de recarga que mejor se adapte a tus necesidades y a las de tu vehículo.
Tipos de cargadores y sus características
Existen diferentes tipos de cargadores para coches eléctricos, cada uno con sus características, ventajas e inconvenientes:
Los semi-rápidos son los más comunes para uso doméstico y ofrecen una carga más rápida y segura que un enchufe convencional. Dentro de los semi-rápidos, existen diferentes modelos con distintas potencias de carga (desde 3,7 kW hasta 22 kW) y funcionalidades (carga inteligente, programación horaria, control de acceso).
Asegúrate de elegir un cargador que sea compatible con tu vehículo eléctrico, que ofrezca las funciones que necesitas y que se ajuste a tu presupuesto.
Seleccionando el cargador ideal para las necesidades de la comunidad
Si varios vecinos están interesados en instalar un punto de recarga, podéis considerar la instalación de un sistema de recarga compartido. Existen diferentes sistemas de recarga compartida, con distintas funcionalidades y capacidades, por lo que lo fundamental a la hora de elegir será:
- Número de usuarios: ¿Cuántos vecinos necesitan cargar su coche eléctrico? Si son varios, un sistema de carga compartida, que permita la carga simultánea o secuencial de varios vehículos, puede ser la mejor opción. Estos sistemas optimizan el uso de la energía y reducen los costes de instalación.
- Potencia disponible: La potencia contratada por la comunidad limitará la potencia del cargador o la cantidad de cargadores que se pueden instalar.
- Presupuesto: Los cargadores con mayor potencia o funciones inteligentes suelen ser más caros. Estableced un presupuesto y buscad opciones que se ajusten a él.
- Funcionalidades: Algunos cargadores ofrecen funciones como la carga inteligente, que optimiza la carga en función de la demanda de la red eléctrica, o la programación horaria, que permite cargar el coche en las horas valle con tarifas reducidas.
En la mayoría de los casos, tal y como hemos comentado previamente, la solución ideal para un garaje comunitario es un semi-rápido con balanceo de carga (load balancing).
Este sistema permite que varios usuarios compartan un mismo punto de suministro, ajustando la potencia de carga de cada vehículo en función de la demanda y la potencia disponible.
Además, algunos semi-rápidos con balanceo de carga ofrecen funciones adicionales, como la programación horaria y el control de acceso mediante tarjetas RFID, lo que facilita la gestión y el control del consumo de cada usuario.
Cuarto paso: instalación y puesta en marcha
Con el cargador elegido, es hora de la instalación. Este paso es crucial para garantizar una carga segura, eficiente y cumpliendo con la normativa.
Contratación de un electricista cualificado
La instalación de un punto de recarga debe ser realizada por un instalador autorizado, que se encargará de conectar el cargador a la red eléctrica, instalar las protecciones necesarias, como diferenciales y magnetotérmicos, y verificar el correcto funcionamiento del sistema.
Un instalador cualificado te garantizará una instalación segura, eficiente y cumpliendo con la normativa vigente. Además, te asesorará sobre el mantenimiento del punto de recarga y te proporcionará la documentación necesaria, como el certificado de instalación eléctrica (CIE).
Proceso de instalación y configuración del punto de recarga
Una vez realizada la evaluación inicial y la acometida eléctrica, un técnico cualificado realizará:
- Instalación del cargador: El técnico instalará el punto de carga semi-rápido en la pared, conectándolo a la acometida eléctrica. Se asegurará una vez más de que la instalación cumple con la normativa vigente y de que el cargador está correctamente fijado y protegido.
- Conexión a la red y pruebas: Una vez instalado el cargador, se conectará a la red eléctrica y se realizarán las pruebas necesarias para verificar su correcto funcionamiento. Se comprobará la potencia de carga, las protecciones y la comunicación con el vehículo.
- Configuración y puesta en marcha: El técnico configurará el cargador, incluyendo la programación horaria, si el cargador lo permite, y te explicará su funcionamiento. Te entregará el certificado de instalación eléctrica (CIE), que acredita que la instalación cumple con la normativa.
¡Y listo! Disfruta de la comodidad de cargar tu coche eléctrico en tu garaje comunitario
Con tu punto de recarga instalado y funcionando, podrás cargar tu coche eléctrico en la comodidad de tu garaje, sin esperas ni desplazamientos.
Beneficios de tener un punto de recarga en tu garaje comunitario
Cargar tu coche en casa te ofrece numerosas ventajas: comodidad, ahorro, control sobre tu consumo y la posibilidad de aprovechar las tarifas con discriminación horaria. Además, contribuyes a un medio ambiente más limpio al utilizar energía eléctrica para tu movilidad.
Saber más
Para conocer con mayor detalle la normativa y regulación relacionada con la instalación de puntos de recarga eléctricos en garajes comunitarios consulta los siguientes documentos:
- Real Decreto 1053/2014 BOE: https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2014-13681
- Ley de Propiedad Horizontal BOE: https://www.boe.es/biblioteca_juridica/abrir_pdf.php?id=PUB-PR-2023-142