Mi gasolinera favorita. Siempre que puedo lleno aqui. El personal es super amable. Las instalaciones siempre impecables. Carolina una gran profesional.

Estoy encantada con esta gasolina. Siempre dispuestos y con ganas de ayudarte. Sobre todo una chica pelirroja de pelo corto, que no sé cómo se llama, pero que es increíble porque siempre me ayuda y me saca una sonrisa aunque tenga un mal día. Con gente así, siempre te apetece volver.

Es mi estación de servicio habitual, el personal es de lo simpático y eficiente. Hay un pequeño comercio para surtirte de lo más imprescindible, hay cabina de lavado automático para coches. Los aseos siempre impecables. Sin embargo es una pena que una estación de servicio de tal envergadura tengas que pagar para mirar la presión de las ruedas después de dejarte un pastizal para rellenar el depósito de combustible, que menos que al menos tengas la opción de hinchar las ruedas sin tener que meter un euro en una máquina por muy moderna y digital que sea.

Muy correctos

Bien